El proyecto, ubicado en Nakano, Japón, es un sistema de montaje solar agrícola de 9 MW. Está diseñado para revolucionar las prácticas agrícolas mediante la integración de fuentes de energía renovables. Este sistema combina la tecnología fotovoltaica con la agricultura, proporcionando una solución sostenible tanto para la generación de energía como para el cultivo de cultivos. Al optimizar el uso de la tierra y los recursos, pretende contribuir a la transición energética de Japón y mejorar la productividad agrícola local, demostrando un modelo prometedor de coexistencia entre energía verde y agricultura.